Nada Yoga.

Hay un lenguaje universal, más allá de las palabras, cultura, género o nacionalidad. Un lenguaje del corazón que atraviesa todas las diferencias y nos conecta con algo más grande que nosotros. Ése es el lenguaje de la música. El sonido nos conecta con nuestro ser más profundo, con una conciencia más expandida, y también con lo más primordial. Cada un@ de nosotr@s tiene acceso al poder innato del sonido a través de la voz. 


El término o palabra Nada tiene sus orígenes en la India, donde la lengua actual proviene en su mayoría del sánscrito. Una traducción podría ser NA que es aliento (prana) y DA que es fuego (agni), por tanto Nada es la conjunción de aliento y fuego. Otra interpretación dada es Nad, que significa sonido y proviene de la palabra Nada o flujo que puede relacionarse con el flujo de la conciencia.

El antiguo sistema indio del Nāda Yoga, es una ciencia de la transformación interior a través del poder del sonido. Nāda Yoga es el uso consciente de las vibraciones sonoras – que se emiten al cantar, al repetir mantras y al abrirse a la resonancia musical  para modificar estados espirituales y psicológicos. Los practicantes focalizan su mente en el sonido para acceder a estados más profundos de conciencia.

Las ancestrales enseñanzas védicas dicen que el mundo entero emergió del sonido original: el sonido de la creación. Nāda Yoga es un sistema metafísico basado en el supuesto de que el cosmos entero, todo lo que existe, incluso los seres humanos, son vibraciones sonoras llamadas nāda

Nāda Yoga es la unión con el Ser a través del sonido. Es considerado un componente esencial de todas las disciplinas yóguicas, y es ensalzado en el Hatha Yoga Pradipika como una de las formas más poderosas y fructíferas para calmar la mente.

 

Beneficios del Nāda Yoga.

Nāda Yoga trabaja con el principio de «Todo está en estado de vibración», y toma la metáfora musical comparando a la enfermedad como “disonancias” en el organismo. Para poder comparar cómo se siente en el cuerpo podemos pensar en las armonías disonantes y recordar cómo nos hacen sentir cuando las escuchamos: genera tensión, dispersión y rechazo Si la música del cuerpo literalmente perdió la afinación, podemos usar nuestra voz y el sonido para hacerlo volver al equilibrio.

Los resentimientos emocionales y deseos sin resolver se almacenan como toxinas en los canales energéticos o nadis. Cuando usamos conscientemente el sonido, podemos crear profundos efectos en nuestra salud. El uso de las resonancias y vibraciones sonoras en Nāda Yoga tiene un efecto sanador en problemas psicológicos y condiciones espirituales, pueden regular el sistema inmunitario a través del poderoso efecto que tiene en los pensamientos y las emociones. Los mantras, el ritmo y la respiración usados en conjunto pueden crear una respuesta sanadora en el sistema inmunitario. Muchos estudios han demostrado que el sonido, la música, el canto y la meditación influye en las ondas cerebrales. Nāda Yoga puede ayudar también a aliviar la tensión, la alta presión sanguínea, el insomnio y estados mentales negativos, y también evocar profundos estados de relajación restaurativa y ondas cerebrales alfa y theta.

Una práctica que deriva del Nāda Yoga es el Kirtan, la sagrada tradición del canto devocional, que rápidamente nos lleva a la experiencia de unidad y un estado espiritual de dicha. Es una forma de expresar nuestros sentimientos y conectarnos profundamente con otros. El canto regula nuestra respiración y alivia el estrés. Nāda Yoga no requiere canto profesional, porque tiene que ver con la capacidad de conectar con el sonido puro que viene desde nuestro centro.





Txema Mawenya.

Músico y Sonoterapeuta, crece en una familia donde la música y el canto forman parte de la vida diaria, en los más de veinticinco años que lleva experimentando con la música, ha investigado un gran abanico de estilos (rock, jazz, funk, afro-latín, folk , músicas del mundo y música chamánica) formándose en Madrid (Escuela Relatores de música y danza) y en Londres (Goldsmith University). Durante este tiempo ha colaborado y trabajado con diferentes artistas y bandas, dejando plasmada su labor musical hasta el momento en once trabajos discográficos de distinta índole musical.

Siempre interesado por la cosmovisión y las músicas ancestrales del mundo, desde hace más de una década investiga, se forma y profundiza en los beneficios terapéuticos del sonido, las frecuencias armónicas y el carácter  sagrado y sanador de la música, proporcionando desde hace diez años experiencias sonoras individuales y colectivas. Sus conciertos, meditaciones, talleres y círculos de sonido  son una experiencia ritual donde juega con una gran variedad  de instrumentos (voz, cuencos cantores tibetanos, shruti box, tambores, sonajas, instrumentos de cuerda, flautas, etc.) con paisajes sonoros y cantos ancestrales de la tierra, creando  una esfera o burbuja sonora que transporta al oyente y/o participante en un viaje introspectivo.

 

Material a traer.

Simplemente una esterilla para sentarte.